La entropía en el aula se podría interpretar como la diversidad que todo entorno escolar ha de tener, para ser un lugar en el que cada alumno pueda aprovechar al máximo sus capacidades.
La diversidad en los entornos académicos no sólo es conveniente, sino indispensable. Pero dicha entropía hace que las aulas sean lugares en los que a veces resulte complicado enseñar, si no se utilizan las herramientas y estrategias apropiadas.
Aquí es donde cobra fundamental importancia que el profesorado esté preparado y motivado para utilizar los nuevos recursos educativos TIC, así como que desarrolle dinámicas de trabajo novedosas, cooperativas y en definitiva atractivas para los estudiantes.
Para algunos profesores puede resultar ideal el hecho de basar sus clases simplemente en el libro de texto de la asignatura, es posible que esta sea una forma de trabajar fácil y que no requiera demasiados quebraderos de cabeza. Pero cabría preguntarse, ¿qué tipo de alumnos queremos en nuestras aulas?, aquellos que estén motivados y con ganas de estar allí aprendiendo y pasándoselo bien, o aquellos que vengan por obligación y sólo tengan interés en aprobar un examen pero no en aprender.
Después de esta reflexión es fácil llegar a la conclusión de que invertir tiempo a priori en preparar las clases de manera diferente y con la ayuda de los recursos TIC disponibles hoy en día, a la larga nos va a aportar una gran satisfacción personal y profesional, además la mayoría de nuestros alumnos van a aprender, no sólo conceptos académicos, sino lo que es más importante, recursos, estrategias y valores que les ayudarán a afrontar la vida de forma positiva.
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